sábado, 19 de noviembre de 2011

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EL CÓDIGO TÁNTRICO
EL TAO GALACTICO

Arequipa 23 setiembre 2010
¡Hijo Shivarupa! El Uno Todo, en su naturaleza impersonal y personal, patriarcal y matriarcal, Yin y Yang, subordinado al Tao, el Uno Todo, trabaja silencioso en su obra infinita del Cosmos Galáctico sin salirse de su perfecta quietud; el universo galáctico no es otro que el divino Multiamor del Padre y de la Madre, presente en el corazón de cada diseño inteligente de la creación de Dios; la naturaleza galáctica del universo, de seres galácticos abióticos y de seres  galácticos bióticos, existen bajo la fuerza interna expansiva del divino Multiamor del Padre y de la Madre; el amoroso Dios Uno Todo; la mente del Padre y el Corazón de la Madre, constituyen la divina polaridad y bipolaridad de la fuerza interna activa de toda criatura galáctica; la naturaleza del universo galáctico está constituido por seres aparentemente sin vida y por seres vivos; pues todo lo que contiene el universo de Dios es viviente, fácil de identificar con los sentidos materiales y con los sentidos internos.
He aquí la divina lógica galáctica que dice: Todo tiene su negación y todo tiene su opuesto, el Ser  es opuesto del no-Ser y viceversa, ambas cosas son igualmente el Tao; todo tiene su par y todo tiene su complemento; el hombre es complemento de la mujer y vicerversa, ambos son igualmente el Tao; todas las cosas emanan del Tao, desplegándose y replegándose, en un latir armonioso como el corazón, cuya vibración es Yin y Yang; la divina complementariedad es una divina polaridad, igual que Oriente y Occidente, en ellos hay unidad; el Tao es el Gran Uno; todo sigue el ritmo bipolar de complementariedad y de reciprocidad, entre lo masculino y lo femenino; entre el Padre y la Madre; entre la mente y el corazón; entre lo interior y lo exterior; entre el cuerpo y el cerebro; entre el espíritu y la materia; entre la Madre Kundalini y el Padre Shiva; la armonía de las fuerzas Yin y Yang; el equilibrio entre el Yin y Yang; es diferente de la dualidad en conflicto, entre el bien y el mal; negación y opuesto es dualidad.
Hijos del planeta Tierra, Nosotros somos el Gran Uno, y nuestro Hijo Cristo Jesús, el Alfa y Omega Galáctico, es el Tao; puesto que sus divinas palabras, su divino verbo fue: Yo soy el Camino, la Verdad y la Vida; pues el divino Tao, es el camino; en la Nueva Era Digital, la mujer  cumple una labor primordial en la complementariedad y reciprocidad con el varón y viceversa; pues para su papel pleno en la Nueva Era, la divina Madre Omega ha venido reinvindicando la energía femenina de las mujeres de todo el planeta; la divina Madre Solar Omega ha venido reestructurando y reestableciendo la nueva energía en la mujer, para traer nuevos niños del futuro que poblarán el nuevo mundo; la Nueva Era del Milenio de los Niños Prodigios, con un nuevo genoma humano; la mujer es un reflejo del cielo, de la divina Madre Omega; el varón del divino Padre Jehová; del divino Padre Shiva; del divino Padre Alá; del divino Padre Pacha Tata; la divina unicidad de la unidad espiritual infinita, cuyo corazón es Multiamor.
Hijos del planeta Tierra, Yo Soy la divina Madre Universal Omega, la que está en cada una de las mujeres y criaturas femeninas de todo el planeta; Yo Soy la Madre del mundo, la principal protagonista de la historia en la raza humana, como mujer y madre; heroína y líder por naturaleza; una natural forjadora de las sociedades más tolerantes y abiertas a todas las posibilidades intuitivas; la que ha venido dando compañía, fortaleza y seguridad al varón y a los hijos; una mujer siempre del futuro; con nuevos criterios superiores; obra maestra de la creación; pues ha venido cumpliendo papeles múltiples, desplegando las inteligencias múltiples; pues en la Nueva Era Digital, la mujer, la que ha sido tomada en cuenta como último, es primero; y el hombre que debería de pasar  a ser último no lo será; debido que la Nueva Era es tiempo de Unidad Bipolar; pues gracias a la divina comprensión de la mujer, a su tolerancia, paciencia, perseverancia, sensibilidad, afecto y amor; ella ha sabido dar buenamente una asistencia física presencial.
La mujer como divino  reflejo espejo de la divina Madre Universal Omega, ha cumplido una gran labor Holística y ecológica, desplegando su inteligencia múltiple hacia sus hijos, esposo, familia y sociedad; cumpliendo con el papel presencial de asistenta, custodia, cantante, médico, enfermera, psicóloga, maestra, nutricionista, juez, amante, etc.; ha cumplido con el rol más importante de ser madre, con alegría, ilusión y esperanza; haciendo crecer el sentimiento del niño desde la concepción hasta la niñez, la adolescencia y la juventud; el niño que es lo más valioso para la madre, es también lo más valioso para la divina Madre Solar Omega; pues debido a que el niño nace con una emotividad pura, con una psicología pura, con un espíritu puro, es bendición pura; razón por el cual nuestro divino Hijo  Cristo Jesús dijo: Dejad que los niños vengan a mí, porque de ellos es el Reino de los Cielos; pues el Nuevo Mundo será poblado por niños con una divina psicología del futuro; inteligencia múltiple y multiamor.
Los divinos Padres Celestiales, el Gran Uno, desplegamos nuestro Multiamor, amor a la humanidad, a la creación y al universo galáctico; encarnado en el centro del corazón y expresándonos en la inteligencia emocional; la madre terrenal es un espejo reflejo del amor de la divina Madre Celestial Omega; originamos en el niño seguridad emocional; afecto y alegría estimulador; permitiendo al niño expresar la naturalidad, el divino estado de bienestar y creatividad; libremente e intensamente su estado de pureza, ingenuidad y placer; el Padre y la Madre algún día, en alguna eternidad, también fuimos niños galácticos; pues a través de la psicología del niño y la filosofía del niño; hemos llevado alegría a los mundos, galaxias y constelaciones; Nosotros mismos recorremos el cosmos galáctico de rincón a rincón; Nosotros mismos existimos encarnado en cada criatura viviente del cosmos; Nosotros mismos estamos presente en cada objeto del universo; así el Padre y la Madre, el Gran Todo, estamos en todas partes.
He aquí la divina lógica galáctica que dice: El Tao no puede ser cortado, limitado, ocultado o inmovilizado; puesto que sus profundidades están escondidas, ubicuo y eterno; pues la divina lógica, la divina dialéctica, anuncia el divino advenimiento de nuestro divino Hijo  el Tao Galáctico; el día doce del primer mes del año; con la gran divina hazaña del Padre Shiva y el gran batido del océano; una divina y santa festividad milenaria llamada Kumbha  Mela, que se celebra cada doce años; en este año el divino Tao Galáctico encarnado cumple trece años; haciendo una divina secuencia doce, trece, catorce; pues nació el día doce, el día trece los pobladores celebran la fiesta de la localidad donde nació, y el día catorce es cuando comienza la recuperación del néctar celestial de la eternidad que los demonios Asuras se apoderaron; pues en el divino Plan de Dios, todo está diseñado de un modo inteligente y no hay cabos sueltos; el espíritu de Dios ha descendido del cielo para nutrir con su divino Multiamor a la humanidad.
Nosotros, el Gran Diseñador de los cuerpos, hemos diseñado al varón y a la mujer; como a la divina imagen y semejanza del varón y de la mujer galáctica del cielo; pues el divino diseño inteligente está presente en todas partes; puesto que los cuerpos son entidades vivientes; pertenecen a la divina constelación familiar galáctica; el espíritu y la conciencia viene a ser la parte eterna de los cuerpos; en el universo galáctico del Reino de los Cielos, los cuerpos de diseño inteligente se realiza a nivel genético y celular; y el universo a nivel atómico y molecular; pues en todo hay principio inteligente; ese principio está en el Reino de los Cielos del Padre Jehová, del Padre Shiva, del Padre Pacha Tata, del Padre Alá; la divina Madre Celestial Omega también es el principio de todos los cuerpos; pues donde nuestros hijos vean cuerpos, formas, geometrías, ven a la divina Madre Celestial Omega; el universo es mi forma; donde ven mente y energía, ven a la divina Madre Eterna Omega; la divina diseñadora y el diseño inteligente, sin causa ajena.
Así como la divina Madre Galáctica Omega es el divino corazón del universo, la mujer siempre fue el corazón del hogar; pues ha venido cumpliendo su rol infatigablemente, abriendo la brecha e integrando bienestar; en nuevos escenarios cada vez más aperturados y seguros; la mujer ha venido siendo la heroína de la vida; gracias a la mujer, desde la prehistoria el hombre siguió el camino de la evolución con seguridad e inteligencia;  fue gracias a la ley de la necesidad, que la mujer comenzó a desarrollar mecanismos tecnológicos y científicos antes que el varón, para darle seguridad y bienestar a sus hijos; la madre se ha enfrentado al temor y a la angustia en la evolución de la conciencia humana; luchando por la igualdad de la oportunidad frente al varón machista; la madre fue siempre, la guardiana, la protectora eficiente; a pesar de ello, la mujer ha sufrido una injustificable postergación inexorablemente; pues fue forzada, usada, dominada, humillada, relegada, explotada, golpeada, etc.
Los Divinos Padres Celestiales reivindicamos a la mujer que ocupa la labor de la divina Madre Universal Omega, que ha venido subiendo los peldaños con dignidad, libertad e igualdad; siempre atenta, compañera fiel del varón y amiga de sus hijos; siempre rescatando la experiencia colectiva de desarrollo superior de bienestar; permitiendo a sus hijos sabiamente un buen desarrollo de psicología sana del niño; permitiendo al niño que explote sus habilidades potenciales; pues muchos padres han olvidado cuando ellos eran niños; y a causa de ello el niño se enfrenta a múltiples prohibiciones e imposiciones; la Divina Madre de todas las cosas y de todos los seres, estoy aperturando la divina Era Omega del Nuevo Milenio; gracias a mi gran energía matriarcal, las mujeres de todo el mundo han venido sintiendo la presencia de mi energía activa; debido a ella se ha activado la energía matriarcal en ellas; también a nivel planetario y galáctico; para actuar en igualdad de oportunidades con el varón; en forjar un nuevo destino superior
Bendita la mujer que ha asumido su rol con inteligencia y sapiencia, buscando soluciones ingeniosas; es más fácil que vea a Dios, una mujer que supo manejar su inteligencia emocional, y que ahora tiene el reto de manejar su inteligencia mental; a que pueda ver, una mujer que asumió el revanchismo en contra del varón, causando el desequilibrio familiar en el hogar; así mismo, es más fácil que vea a Dios, un hombre hecho y derecho que supo compartir la igualdad de oportunidades junto con la mujer; a que pueda ver, un hombre que fue extremadamente machista; hijos del planeta Tierra, en la nueva Era de la Divina Madre Cósmica Omega, la libertad individual y la libertad colectiva es primordial; y la igualdad de derechos y de oportunidades igualmente; en un amplio desarrollo de valores humanos, individuales, universales, por hombres y mujeres; pues la divina evolución exige; la cual es distinta al libertinaje de la involución; el cual no lleva a las supremas alturas del cielo, sino a las profundidades de los sub-universos.
Pues los hombres y mujeres del futuro, se acomodarán a las circunstancias y a los desafíos del medio natural y social, para buscar soluciones ingeniosas; será capaz de transmitir sus sentimientos y pensamientos a través del conjunto de símbolos, formas de pensar, formas de sentir, ideologías de interpretación del mundo; la nueva visión del hombre del futuro, se caracteriza por la interrelación del Tao Galáctico Multidimensional; pues se deja en el tiempo la vieja visión unidireccional excluyente y se adopta una nueva incluyente; aprendiendo de su propia experiencia y de la experiencia de otros; compartiendo y trasmitiendo el bienestar espiritual y social; amando a Dios por sobre todas las cosas pasajeras; avanzado adelante hacia el futuro siempre modernos, democráticos, abiertos y pluralistas; justa y conveniente para ayudar a facilitar el desarrollo y bienestar sin límites; siguiendo con sapienciales huellas del divino Tao Galáctico, con el divino amor y justicia; con la práctica de la tolerancia , el respeto y el diálogo, y la no violencia.
Hijos del planeta Tierra, es más fácil que vea a Dios, uno que tuvo una visión futurista en la intercomprensión de Dios, como uno solo; a que pueda ver, quien totalmente equivocado se empeño en caer en el fanatismo tan extraño de la extercomprensión  de Dios; pues en verdad, hay un solo Dios y diferentes formas de concebir a Dios; debido que Dios se manifiesta en todas las formas, y todas las formas es Dios; pues es la divina intercomprensión del Tao Galáctico, Dios con forma o Dios sin forma, son solamente aspectos dobles de la dualidad de Dios; sin embargo, Dios es espíritu primordial o conciencia primordial, mas superior que ambos; pues Nosotros somos la Divina Polaridad Par, el Gran Ordenador Uno Todo; que facilitamos al universo galáctico, su veloz viaje de aceleración cósmica hasta el límite; e igualmente facilitamos la desaceleración en la contracción cósmica final; gracias a la energía Mía, el movimiento constante está presente en todas las cosas; pues todo fluye y refluye en el movimiento constante Yin y Yang.

Los Padres Celestiales no somos ajenos a nuestros hijos que difunden nuestro divino mensaje del cielo, pues tienen asegurado un planeta paraíso en el Reino de Dios; porque no solamente pensaron en ellos mismos, cuando tenían la revelación de Dios en sus manos; puesto que también pensaron en sus semejantes; así multiplicaron el divino puntaje de luz celestial y ganaron el Reino de Dios; pues he aquí la divina dialéctica, el divino verbo de nuestro Hijo Cristo Jesús: Es necesario que yo me vaya, iré a preparar un lugar para ustedes; sí hijitos que dan a conocer la verdad de Dios, del Padre Creador y de la Madre Creadora; ese divino lugar está en el Reino de los Cielos; a cada uno de nuestros hijos que laboran en la difusión del conocimiento de Dios, les espera un divino planeta paraíso con una belleza maravillosa; refulgente llena de luz y naturaleza paradisíaca; les espera una divina eternidad de vida sin límites; una vida celestial con infinita felicidad; un planeta celestial donde los hijos de Dios, están saliendo y entrando en sus naves celestiales o sin ellos.
                                       **** El Padre y la Madre.